Hace unos días os hablé de la gran recepción que tuvo mi vídeo »100 segundos que cambiarán tu forma de pensar» en las redes sociales. Sin embargo no mencioné mi colaboración con un puntero proyecto de las personas sin hogar en Sevilla. Decidí reservarlo para el siguiente post y así poder profundizar más.
El pasado agosto, tras pasar varios días respondiendo los comentarios de felicitación por el viral, recibí un mensaje que no podía contestar con un simple »Muchas gracias, me alegro de que te haya gustado el vídeo». Un tal Lagarder Danciu comenta »Carlos, te gustaría colaborar en la realización de unos materiales sobre los sintecho???».
Me explica por Facebook la finalidad del proyecto –Nuestro objetivo es conseguir la donación por parte del Ayuntamiento de un terreno para construir una carpa física donde las personas sin hogar puedan cobijarse los 365 días al año mientras buscan reincorporase a una vida normal.
Para poder conocer mejor el proyecto me invitó a una de sus reuniones. Ahí pude conocer a todos los voluntarios, muy comprometidos todos. Pero fue hablar con Lagarder lo que realmente aumentó mi interés.
-Actualmente casi 1000 personas duermen a diario en la calle. Sufren agresiones, son ignoradas y apenas tienen posibilidades de abandonar esta vida- me decía el activista.
A mediados de septiembre, con el retorno a la rutina a la vuelta de la esquina, me informó del, por aquel entonces, pequeño campamento que habían iniciado para reclamar la concesión del terreno por parte del Ayuntamiento.
-Carlos, ven a pasar una noche al Campamento, será interesante y podrás ayudarnos grabando un reportaje mostrando la terrible realidad que viven unas 1000 personas en Sevilla.
Eso fue suficiente para convencerme de que iba a ser una experiencia de las que te marcan la vida.
Nada más llegar al campamento Lagarder me presentó a Fidel, Manuel, Carmen, Angeles y Juan, 5 personas que en estos momentos se encuentran viviendo en la calle.
Suelen decir que una imagen vale más que mil palabras, así que para resumir la noche os dejo con el reportaje.
-¿Qué tal la noche, Carlos? – me pregunta Fidel por la mañana.
-Muy interesante, pero solo he dormido 3 horas.
-Pues así son la mayoría de nuestras noches.
Tras esa noche empecé a visitar el campamento con mayor frecuencia y pude observar su avance, desde varios sacos de dormir a diez u once tiendas de campaña.
En las semanas siguientes Manuel, una persona sin hogar de 57 años, se incorpora al campamento. Manuel apenas puede moverse debido a una discapacidad física pero su mente funciona brillantemente. Por eso le dicen El Poeta. Pasa los días escribiendo versos que luego comparte con los visitantes del campamento.
Más adelante Zatu Rey del dúo de rap sevillano Sfdk se interesó en el proyecto y nos comunicó su intención de visitar el campamento.
-Para mi ha sido muy interesante conocer a Lagarder y que me haya explicado la situación de las personas sin hogar- me comenta Zatu al llegar.
El 28 de noviembre, tras 73 días acampando en la avenida de Torneo, el Campamento Dignidad decidió, ante la ya próxima cesión del espacio por parte del Ayuntamiento de Sevilla, desmontar sus tiendas a la espera de que las personas sin hogar puedan disfrutar cuanto antes de un edificio donde cobijarse, resguardarse del frío y poder dormir con tranquilidad.

Poder colaborar con el proyecto ha sido una de las experiencias más interesantes que he realizado. Le debo este interés a Lagarder Danciu. Creo que su afán por mejorar la sociedad en la que vivimos ha conseguido visibilizar algunos de los problemas sociales y de esta forma conseguir que muchos nos preocupemos por estas causas.
También me gustaría mencionar a todos los voluntarios del proyecto La Carpa a los que he podido conocer a lo largo de estos dos últimos meses.
Un saludo,
Carlos