– Penny, Penny, Penny. Amy, Amy, Amy. Leonard, Leonard, Leonard.
Afortunadamente yo solo tengo que escucharle cuando veo TNT a las dos de la tarde. No quiero imaginarme cuantas veces los amigos del físico más inteligente han tenido que abrir la puerta tras sonar su peculiar »timbre».
Ayer volvió a sonar en mi salón. Acaba de estrenarse la nueva temporada y debo admitir que el primer capítulo mantiene el nivel. ¡Pero no vamos a hablar de Big Bang Theory!
CBS ha apostado este año por seguir explotando al personaje de Sheldon Cooper con una precuela; Young Sheldon. La trama se desarrolla en Texas, en torno al personaje de Sheldon a la edad de 9 años.
¿Funciona? ¿Mantiene el nivel? ¿Es una comedia?
En primer lugar debo indicar que solo he podido ver el capítulo piloto. Los demás estarán disponibles a partir del 2 de Noviembre.
Admiro muchos aspectos del spin-off. Olvídate de las risas enlatadas, aquí no las escucharás. Creo que han perseguido un enfoque más natural, es decir, alejándose un poco del estilo sitcom. En Big Bang Theory casi toda la trama transcurre en interiores – el apartamento de Sheldon, el apartamento de Penny y la universidad – grabados en estudios decorados. En Young Sheldon observamos muchos más escenarios exteriores.
La cinematografía es más artística. La iluminación, la profundidad de campo y los planos son más comunes en cine que en una comedia de televisión. Sin duda el director de fotografía se lo ha currado.
También hay que destacar la gran interpretación que realiza Iain Armitage como protagonista. Se adapta genial al rol de joven Sheldon.
No obstante, ¡falta algo importante!
¡Ah sí!
Las risas. Y no me refiero a las de fondo que escuchas en Big Bang. Sino a las nuestras. Los one-liners (chistes) simplemente no son graciosos. Los únicos momentos más animados, en el sentido humorístico, son las narraciones de Jim Parsons (el Sheldon del presente). El primer capítulo no aporta nada nuevo. Para Chuck Lorre y Steven Molaro (creadores de ambas series) tener un genio prodigioso de 9 nueve años que repita lo mismo que su versión mayor ha sido motivo suficiente para dedicarle una nueva serie. Pero para los que llevamos más de diez temporadas conociendo los problemas sociales de Sheldon quizás no es bastante.
Creo que ya he comprendido porque faltan las risas enlatadas. No encontraron donde introducirlas.